En los alrededores ya se vive la fiesta del TC con todos los colores y el folclore de la previa. A las 23 de la noche de este jueves, la fila de motorhomes, casas rodantes, camiones y vehículos de todo tipo poblaban una larga fila que se extendía desde el cruce de Lehmann y el desvío con el tránsito pesado hasta calle D’Agostino, de ambos lados de la avenida Lehmann, y también por D’Agostino hasta el ingreso de la RN 34. Y los vehículos seguìan llegando.
Además, los equipos de TC y TC Pista también comenzaron a formar filas, en este caso sobre el Bv. Lehmann y desde el sector previsto para el ingreso al autódromo, en todo el perímetro externo del predio hacia el Sur, esperando su turno para el momento en que se abran las puertas del autódromo.
Asados, mucha música y todo el marco que el público le pone a la fiesta del TC ya se viven a pleno. El año pasado la carrera se disputó en el marco de la pandemia: no se permitió acampar y el público, acotado a 3.500 personas, sólo pudo ingresar el día de la carrera. En esta ocasión, con plena normalidad, ya se podrá acampar desde este viernes, mientras que la actividad en pista se concentrará durante sábado y domingo.
A la tarde de este viernes desde la organización se hablaba de cerca de 5 mil entradas anticipadas vendidas, mucho más que la cantidad de entradas anticipadas que se venden habitualmente, lo que hace presumir un extraordinario marco de público para este reencuentro con el TC en Rafaela.