FUENTE: LA CAPITAL
El fiscal Luis Schiappa Pietra, quien investiga la presunta participación del senador provincial Armando Traferri (San Lorenzo) en una red de juego clandestino, señaló que la acusación que realizó el legislador en contra suya y de su par Matías Edery por presunto «espionaje clandestino» forma parte de «una más de las tantas maniobras del senador para intervenir el normal desarrollo de una investigación penal«. Además, anunció que se avanza en un nuevo pedido de desafuero para el legislador.
Este miércoles, en una denuncia que tiene 40 carillas, Traferri afirmó que los fiscales requirieron de manera ilegal los datos de tráfico de una línea de telefonía celular que el Senado le asignó durante al menos dos años. Traferri denunció que, mientras Edery y Schiappa Pietra pedían su desafuero a la Cámara alta, en realidad estaban obteniendo información sobre este teléfono móvil de manera clandestina.
«Antes, durante y después del fallido pedido de desafuero realizaron directamente pesquisas indiscriminadas sobre datos de tráfico de mi celular», planteó Traferri, para luego remarcar: «No solamente no lo tenían permitido hacer en razón de mis fueros, lo cual no es poca cosa; sino que ese tipo de información recolectada -con fuero o sin él-, por sus características y extensión, requiere necesariamente de la orden de un juez, de la cual carecieron absolutamente. Eso es ilegal sin vueltas».
La denuncia se basa en el artículo 52 de la ley 13.013 del MPA, que en el punto castiga «actuar con negligencia en la búsqueda de las pruebas que fueren necesarias para la presentación de una acusación o para su fundamentación ante los tribunales”, «hacer peticiones, presentaciones o dictámenes que tengan como base hechos manifiestamente erróneos, o que invoquen fundamentos legales manifiesta e indudablemente improcedentes» y «causar un grave daño a la persecución penal con motivo de no haber cumplido debidamente las actuaciones procesales bajo su responsabilidad».
En la causa por juego clandestino por la que los fiscales investigan a Traferri por consideralo parte importante de una organización que hizo prosperar el juego clandestino en la provincia de Santa Fe y a la que se le brindó una malla de cobertura judicial, fueron desplazados y detenidos el ex fiscal regional de Rosario, Patricio Serjal, y el ex fiscal Gustavo Ponce Asahad. Este último recuperó su libertad.
Este jueves, en declaraciones al programa «El primero de la mañana», de LT8, Schiappa Pietra dijo que, si bien aún no accedieron al documento de la denuncia, la tomaban «como una más de las tantas maniobras del senador (Traferri) para intervenir el normal desarrollo de una investigación penal; uno mas de los tantos panfletos, las formulaciones que menciona son impresentables».
El fiscal recordó cuando el legislador los denunció por apelar una resolución judicial. «Esa es la calidad técnica de los escritos que presenta, es la cuarta o quinta denuncia que hace contra nosotros«, dijo el fiscal.
Asimismo, consideró que la situación ya «excede lo razonablemente tolerable, hay un nivel de obstaculización del normal desarrollo de una investigación que debería ser advertido por todo el arco político y llamar a la reflexión«.
En ese sentido, agregó que «llama la atención que no haya una reflexión institucional pública que dé cuenta de lo que está pasando en Santa Fe. Nuestras investigaciones tienen sospechosos con cierto grado de poder; si esto va a ser moneda corriente en este tipo de investigaciones, que nos digan y no investigamos más esto».
Según el funcionario del MPA se necesita «un Ministerio Público con una definición clara y contundente de todo el espectro político de cómo vamos a transitar este tipo de investigaciones; esto se debiera traducir en una definición por parte del Senado de cuánto tiempo sostendrán los fueros del senador».
«Estamos reflexionando sobre un próximo pedido de desafuero, veremos que van a hacer en todo el espectro político«, adelantó el funcionario judicial.
Por último, evaluó que «urge la resolución de la Corte Suprema de Santa Fe que tiene en su despacho una definición central para lo que hoy es una coyuntura política muy importante, si podemos o no investigar corrupción por parte de un senador».