MIentras continúa el hermetismo en torno a la investigación por el doble homicidio de «Mosquito» Mendoza y de Marcelo Sánchez, ocurrido en diciembre en el barrio Italia, en la tarde de este miércoles sucedió otro inquietante episodio violento, cuando desde un vehículo en movimiento se efectuaron varios disparos contra el garage de una vivienda ubicada en Lavalle y Ramón y Cajal, con frente sobre Lavalle.
Al menos tres impactos de bala se pueden observar en las puertas del garage, en un lugar cuya propiedad pertenecería a un allegado a una de las víctimas del doble crimen. Incluso en la misma noche en que se cometieron esos sangrientos asesinatos, el apellido del hombre que es propietario del lugar atacado este miércoles era mencionado como posible dueño del auto en el que se movilizaban las víctimas al momento de ser atacado.
De comprobarse este vínculo, el doble homicidio cobra otra dimensión más preocupante. No sólo los autores materiales y sus potenciales instigadores siguen libres, sino que la saga de violencia continúa, ahora con una «advertencia» que está en sintonía con la violencia exhibida por los criminales cuando virtualmente ejecutaron a sus dos víctimas en el hecho ocurrido en Destéfanis y Edison: ahora, a plena luz del día, efectuaron un ataque contra una vivienda sin preocuparse si detrás de las puertas del garage había mujeres, niños o cualquier otra persona.
Mientras tanto, en torno a la investigación de estos hechos persiste un manto de silencio y no han trascendido avances, aunque existe la firme sospecha de que el móvil de estos episodios estaría vinculado a diferencias en torno a cuestiones relacionadas con la comercialización de estupefacientes.
