La problemática de los caballos sueltos en algunos barrios de la ciudad lleva varios años y se ha ido incrementando con el tiempo. Esto ha motivado múltiples quejas de vecinos que se encuentran con equinos en los patios de sus casas tomando agua de sus piletas, como sucede en los barrio Mora o Virgen del Rosario. O bien con animales que cruzan avenidas transitadas como Gabriel Maggi e Italia generando situaciones de riesgo para los conductores de diferentes vehículos. Se pueden ver en los barrios las recurrentes intervenciones del personal de la Guardia Urbana arreando caballos que son dejados en loteos para alimentarse y que luego se desplazan por la ciudad. En algunos casos cayendo en pozos, requiriéndose luego un importante despliegue de las fuerzas de seguridad para su rescate. También suele preocupar el estado sanitario de algunos de estos animales en cuanto a alimentación y atención veterinaria se refiere, preocupación que se extiende a ciudadanos en general y a proteccionistas en particular.
Finalizaron los dos corrales municipales
Ante este panorama la Municipalidad de Rafaela terminó de construir hace tres semanas dos corrales en busca de empezar a darle una solución al problema con el fin de que «por las buenas» los dueños de estos animales tengan un lugar donde dejarlos y que no deambulen por la vía pública. Sobre todo teniendo en cuenta que existe una ordenanza que prohibe que animales rurales estén en el éjido urbano. Los corrales construidos se ubican en Av. Italia y Camino 5, al norte del barrio Mora, y en Río de Janeiro y Camino 13, continuidad de Remedios de Escalada, al este de barrio Villa del Parque.
Se registraron 91 animales
De acuerdo a lo que pudo confirmar RAFAELA NOTICIAS, adhirieron voluntariamente a retirar los caballos de la vía pública varios vecinos, lo que implicó 91 animales registrados. A los que el Municipio les provee agua y corral, mientras que los dueños de los equinos se hacen cargo de la salud y el alimento. Se calcula que en Rafaela hay unos 160 caballos en el éjido urbano, por lo que todavía faltan registrar y que ingresen a los corrales 70 animales más. Recordando que entre los dos corrales construidos se pueden albergar a 200 caballos en total. «Creo que es un camino iniciado positivamente en la concientización sobre la convivencia con los animales. La cantidad hasta el momento – de caballos llevados a los corrales- es más de lo esperada para la etapa inicial. Igualmente falta mucho», reconocieron desde la Subsecretaría de Salud del Municipio a este medio.
Intervención de la Justicia y la Policía
La parte más compleja viene a partir de ahora, y es cómo hacer para que esos 70 equinos que siguen en la ciudad puedan ser reubicados en los corrales a pesar de la negativa de sus dueños. Es que ya no alcanza con la voluntad del Municipio, sino que ahora deben intervenir otras dependencias y/o fuerzas, tales como la Fiscalía Regional en casos de que haya denuncias por maltrato animal por el mal estado físico de los mismos o porque se encuentran atados sin sombra y sin agua; y de la Guardia Rural Los Pumas ante el incumplimiento de la ordenanza que prohíbe la presencia de caballos en todo el éjido urbano. Las intervenciones de «las patas» judicial y policial deberán darse de manera coordinada y rápida para lograr los efectos esperados. La recomendación es que aquellos vecinos que quieran buscar información sobre el tema, puedan hacerlo en Zoonosis municipal, en tanto las denuncias las pueden realizar directamente en la Guardia Rural Los Pumas.
Fuente RN