Durante la noche del miércoles, en la sede del Rotary Club Rafaela, se realizó el acto de reconocimiento a los alumnos de distintas escuelas secundarias de la ciudad que culminan sus estudios este año y que fueron becados por la institución a lo largo de toda su trayectoria escolar. Se trata de un acompañamiento sostenido que busca garantizar la continuidad educativa de jóvenes de la ciudad desde el ingreso al nivel medio hasta su egreso.
Un programa histórico con más de cuatro décadas de trabajo
En diálogo con RAFAELA NOTICIAS, María Verónica González, presidenta de la Rueda Interna del Rotary Club Rafaela, y Mary Monteverde, integrante del Comité de Becas, explicaron la importancia de este programa y los alcances que ha tenido a lo largo del tiempo.
González señaló que el acto es «el agasajo en el que nosotros le vamos a hacer un reconocimiento a todos los becados que se reciben este año». Monteverde precisó que en esta oportunidad “tenemos 18 chicos, 18 becados nuestros, que se reciben, que reciben acompañamiento durante toda su etapa secundaria”. Ambas destacaron que se trata de “un acto muy lindo, muy gratificante”.
Las becas se otorgan desde el ingreso a primer año y acompañan a los estudiantes durante los cinco o seis años que dura su recorrido, según cada escuela. Incluyen fotocopias, materiales escolares, libros —cuando son solicitados— y los elementos específicos que requieren las escuelas técnicas, como “tableros, reglas y distintos materiales”.
Además del aporte económico, González remarcó que el programa se sostiene en “el acompañamiento sobre todo de las madrinas y padrinos, que los apoyan, los alientan y los siguen durante los cinco o seis años, mientras estudian”. También se ofrece apoyo escolar “en caso de que lo requieran”.
Monteverde subrayó que este acompañamiento es fundamental tanto para los chicos como para sus familias y resaltó la satisfacción que genera ver los resultados: “Es una gran satisfacción el tener hoy 18 chicos que se reciben, siendo que por año entran 25 becados, porque es uno por cada escuela primaria”.
El programa nació en 1979, impulsado por una integrante de la entonces Rueda Femenina, Doris de Giuliani. “Ella fue la que nos iluminó en cuanto a las becas”, recordó González. Desde entonces, el Rotary fue modificando y fortaleciendo la iniciativa, incorporando reglamentaciones y sosteniendo su continuidad. Con el paso del tiempo, y ante la magnitud del trabajo —actualmente son alrededor de 100 becados por año—, los rotarios también se sumaron para colaborar con las actividades que antes sostenían únicamente las integrantes de la Rueda Interna.
Cómo se elige a los becados y cuál es la situación actual
Según explicaron, los becados son seleccionados por las directoras de las escuelas primarias junto con sus docentes. Se prioriza a estudiantes que demuestren “responsabilidad, ganas de estudiar, ganas de progresar”, pero también que pertenezcan a familias con necesidad de apoyo económico para sostener la escolaridad.
Monteverde remarcó que esta combinación de mérito y necesidad es clave: “Son chicos que tienen que estar elegidos y que lo necesiten y lo merezcan, ambas cosas”.
Este año, todas las escuelas ya enviaron sus propuestas y el Rotary está terminando de confeccionar el listado de los 25 nuevos becados que comenzarán el secundario en 2026. Entre el 12 y el 15 de diciembre se entregarán los certificados que los habilitan formalmente a iniciar su trayecto con el acompañamiento institucional.
González señaló además que el paso de séptimo grado al primer año del secundario sigue siendo un desafío para muchos estudiantes: “En primer año es un salto muy grande. Este año lo vimos. Es como que a los chicos les cuesta cada vez más”. El Rotary acompaña estas situaciones con horas adicionales de apoyo escolar cuando se requiere y con contacto permanente con las familias para detectar necesidades específicas.
La voz de los protagonistas: estudiantes y familias
RAFAELA NOTICIAS también habló con los estudiantes becados y con sus familias, quienes coincidieron en valorar profundamente el acompañamiento recibido por el Rotary Club Rafaela. Destacaron que la beca no solo significó un apoyo económico para afrontar gastos como fotocopias y materiales escolares, sino también un acompañamiento pedagógico que resultó fundamental para quienes necesitaron refuerzos, especialmente en los primeros años del nivel medio.
Las familias resaltaron el seguimiento personalizado, la constancia de las madrinas y padrinos y la contención brindada ante cada dificultad. Los propios estudiantes expresaron que este acompañamiento les permitió sostener su compromiso con la escuela y llegar al final del secundario con mayores herramientas y confianza.







