Un violento ataque con un lanzallamas improvisado dejó ocho personas heridas en Boulder, Colorado, Estados Unidos, durante una manifestación pacífica en apoyo a los rehenes israelíes en Gaza. El agresor, identificado como Mohamed Sabry Soliman, fue detenido y el FBI investiga el hecho como un acto de terrorismo ideológicamente motivado.
El ataque y sus consecuencias
El incidente ocurrió el pasado domingo en el centro comercial peatonal Pearl Street Mall, donde se desarrollaba una marcha organizada por el grupo «Run For Their Lives». Soliman, de 45 años, utilizó un lanzallamas casero y lanzó bombas molotov contra los manifestantes mientras gritaba «Palestina libre».
Las víctimas, de entre 52 y 88 años, sufrieron quemaduras de diversa gravedad; una de ellas se encuentra en estado crítico y es sobreviviente del Holocausto.
Detención del sospechoso
Tras el ataque, Soliman fue arrestado sin oponer resistencia. Se informó que es ciudadano egipcio y que su visa había expirado en febrero de 2023, por lo que residía ilegalmente en Estados Unidos. El FBI y las autoridades locales consideran que actuó solo y continúan investigando sus posibles motivaciones.
Reacciones y medidas de seguridad
El gobernador de Colorado, Jared Polis, condenó el ataque y expresó su solidaridad con las víctimas. La comunidad judía local manifestó su preocupación por el aumento de actos antisemitas en el país. Como medida preventiva, se incrementó la seguridad en eventos religiosos y culturales en la región.
Contexto internacional
Este ataque se produce en un clima de creciente tensión global debido al conflicto entre Israel y Hamas, que ha generado un aumento de incidentes antisemitas e islamófobos en diversas partes del mundo. Organizaciones como la Liga Antidifamación han alertado sobre el incremento de estos actos de odio y la necesidad de medidas para prevenirlos.
El ataque en Boulder resalta la urgencia de abordar la violencia ideológica y proteger a las comunidades vulnerables. Las autoridades continúan investigando para esclarecer los hechos y prevenir futuros incidentes similares.
Impacto en la comunidad local
Vecinos de Boulder expresaron su conmoción tras el ataque, señalando que se trata de una ciudad conocida por su espíritu pacífico y tolerante. Organizaciones civiles y religiosas locales convocaron a una vigilia en honor a las víctimas y para repudiar cualquier forma de odio ideológico.
“Este tipo de violencia no tiene lugar en nuestra comunidad”, expresó una representante de la alcaldía durante una conferencia de prensa. La vigilia buscó no solo acompañar a los heridos, sino también enviar un mensaje de unidad frente al extremismo.
