El exfutbolista colombiano Freddy Rincón, quien había sufrido el pasado lunes un grave accidente automovilístico en la ciudad de Cali y permanecía internado en estado crítico, falleció a los 55 años.
«La Clínica Imbanaco, previa autorización y en compañía de sus familiares, se permite informar a la opinión pública que, pese a todos los esfuerzos realizados por nuestro equipo médico y asistencial, el paciente Freddy Eusebio Rincón Valencia, ha fallecido», informó el centro médico, en un comunicado en el que precisó que la muerte se produjo en el día de ayer.
Rincón había sufrido un traumatismo craneoencefálico «severo» este lunes en un accidente automovilístico que protagonizó en la ciudad colombiana de Cali, en el que otras cuatro personas resultados heridas.
«La Clínica Imbanaco, previa autorización y en compañía de sus familiares, se permite informar a la opinión pública que, pese a todos los esfuerzos realizados por nuestro equipo médico y asistencial, el paciente Freddy Eusebio Rincón Valencia, ha fallecido»
Según la información que trascendió, el automóvil en el que viajaba el exjugador, de 55 años, chocó contra un colectivo en el barrio San Fernando de la ciudad de Cali, Colombia, al pasar en rojo un semáforo, de acuerdo con imágenes registradas en un video, un dato que luego fue confirmado por el alcalde de la ciudad, Jorge Iván Ospina, que detalló que el exfutbolista no manejaba al momento del accidente.
Rincón, nacido en Buenaventura, el puerto marítimo más importante de Colombia, es una gloria del fútbol colombiano y formó parte de la generación del seleccionado que clasificó a tres mundiales consecutivos, Italia 1990, Estados Unidos 1994 y Francia 1998.
Rincón, un prodigio de potencia física (1,94 metros) y velocidad. Jugó en el Real Madrid en 1995/1996 con escasa relevancia, totalizando 26 encuentros y sin poder marcar goles, teniendo como DT a Jorge Valdano.
El goleador en Brasil brilló en Palmeiras (campeón paulista y brasileño), Corinthians (campeón paulista, brasileño y mundial), Santos y Cruzeiro, además de vestir la casaca celeste del Nápoli entre 1994/95.
También, dejó notables actuaciones con el seleccionado de su país la primera en Italia 1990, cuando le marcó el gol del empate ante Alemania (1-1) en el estadio Guisseppe Meazza de Milano, tras una notable habilitación de Carlos «El pibe» Valderrama, en un equipo eliminado en octavos de final por Camerún. Jugó 10 cotejos mundialistas y ese fue el único gol que señaló.