Un sujeto que había estado detenido en la Alcaidía local protagonizó una increíble saga que lo volvió a depositar tras las rejas.
El individuo en cuestión había sido detenido en Frontera, acusado de violencia de género, en un hecho que había sido denunciado el día anterior, es decir, el jueves. Luego de pasar el día en condición de detenido, cerca de las 18 del viernes fue liberado.
El muchacho, David Alfredo D., de 19 años, se fue a la Terminal de Ómnibus pero parece que en el camino decidió ahorrarse el dinero del micro y se robó una moto Honda Wave, de color rojo, desde el Hipermercado Libertad, frente a la Terminal.
Hecho esto, emprendió viaje hacia su ciudad. Sin embargo, mientras transitaba por la autopista, a la altura del segundo puente intercambiador -en el km. 203 aproximadamente- decidió regresar e ingresar al obrador de la empresa Pietroboni, para consultar a la persona que estaba encargada de la guardia cómo tenía que hacer para tomar la autovía 19.
Su mala suerte fue completa: en la guardia del obrador, cumpliendo servicio adicional, estaba el mismo policía que unas horas antes lo había liberado en la Alcaidía. Cuando el efectivo policial le preguntó sobre la propiedad de la moto, el muchacho le dijo que era suya. Lógicamente, al corroborar con las dependencias policiales el guardia pudo saber que unos minutos antes se había robado una moto similar a la descripta desde el Hiper Libertad, por lo que el muchachito quedó otra vez preso.