Diciembre marca el final del mandato de Marín Racca como concejal, una etapa que se suma a su experiencia previa como subsecretario de Salud municipal, cargo que asumió días antes de la declaración del aislamiento social preventivo y obligatorio en 2020. “Asumí el 17 de marzo y el 20 se decreta el aislamiento. Mirando hacia atrás parece que hubieran pasado 50 años y solo fueron cinco”, recordó.
El concejal saliente señaló que su recorrido por el Ejecutivo y el Legislativo le permitió conocer en profundidad el funcionamiento del Estado. “Lo público no funciona igual que lo privado. Tiene procesos, tiempos y fundamentos que muchas veces se desconocen. Cuando uno opina sin haber pasado por ahí, lo hace con información incompleta”, afirmó.
En esa línea, sostuvo que la administración pública enfrenta el desafío de adaptarse a una dinámica social más acelerada. “El Estado hoy parece lento en un mundo que va muy rápido. Eso nos obliga a hacer que funcione cada vez mejor, porque no hay otra alternativa”, expresó, y agregó: “Creo que el Estado es servicio al otro. Es más que la suma de individualidades”.
Sobre su paso por el Concejo Municipal, Racca destacó el trabajo colectivo. “Intenté consolidar un equipo y creo que se notó. Es mucho mejor trabajar en bloque que de manera individual. Ejemplos individuales hay muchos, pero bloques consolidados hay pocos”, remarcó.
Al ser consultado sobre el cierre de su mandato, fue claro respecto a su balance personal. “Quiero volver a ser un ciudadano más, caminar por la calle sin esa mirada inquisidora que muchas veces recae sobre el dirigente político. Me voy con la tranquilidad de haber hecho todo lo que estaba a mi alcance, formándome, estudiando y basando las decisiones en evidencias y no en discursos”, señaló.
En cuanto al escenario que observa hacia adelante, Racca manifestó preocupación por la situación socioeconómica. “Veo problemas crecientes, más conflictos y menos soluciones. El desempleo es un golpe muy fuerte; lo viví de cerca en los años noventa y veo señales similares hoy”, advirtió. En ese sentido, subrayó: “Gobernar es crear trabajo. El trabajo tiene que estar en el centro de las políticas públicas, porque de ahí se desprenden la seguridad, la educación y la salud”.
Tras dejar el Concejo, Racca confirmó su regreso a la actividad médica. “Voy a volver a la guardia del hospital, que es mi cargo original. Reencontrarme con la salud pública es volver a enfrentar realidades complejas”, indicó, y resaltó la importancia del nuevo edificio hospitalario: “Es una infraestructura de primer nivel, ahora el desafío es que el funcionamiento esté a la altura”.
Finalmente, expresó su postura frente a los discursos que cuestionan el conocimiento científico. “Poner en duda la evidencia médica es grave. La estrategia de vacunación es comunitaria y está respaldada por décadas de investigación. No se puede discutir la ciencia contra relatos”, sostuvo. De esta manera, Marín Racca cerró su etapa como concejal, con una mirada crítica sobre el presente y un regreso a su profesión de origen, reafirmando su enfoque en la salud, el trabajo y las políticas públicas basadas en evidencia.







