En el marco del Congreso Maizar 2025, el presidente de YPF, Horacio Marín, delineó la visión estratégica de la compañía energética y aseguró que el objetivo a mediano plazo es que el sector hidrocarburífero pueda igualar al agro en su capacidad de generar ingresos fiscales y exportaciones para la Argentina. “Vamos a ayudar a la República Argentina a tener ingresos fiscales y de exportación similares a lo que es hoy el campo argentino”, afirmó durante su presentación titulada «En búsqueda de la eficiencia: la transformación de YPF».
Marín destacó que el plan 4×4 de la empresa —basado en eficiencia operativa, rentabilidad, desarrollo intensivo de Vaca Muerta y el avance del proyecto de Gas Natural Licuado (GNL)— busca posicionar a la Argentina como un actor relevante en el mercado energético mundial, con una meta de exportaciones anuales por US$ 40.000 millones hacia 2030.
En ese contexto, defendió la concentración de recursos en la formación de Vaca Muerta, donde los costos de extracción son significativamente más bajos (USD 5 por barril), en contraste con los campos maduros, cuyo costo trepa a USD 28. “Era una obligación salir de esos yacimientos. No solo perdíamos dinero, sino que necesitábamos redirigir esfuerzos para que YPF tenga futuro”, explicó.
Más allá de Vaca Muerta
A pesar del foco actual en el shale, Marín anticipó que la empresa ya está pensando a largo plazo: “Hemos creado una vicepresidencia de Nuevas Energías para pensar el crecimiento más allá de Vaca Muerta”. Además, destacó el liderazgo tecnológico de la compañía con la implementación de centros de inteligencia en tiempo real (RTICs) en Puerto Madero y en la Refinería de La Plata, que permiten tomar decisiones estratégicas al instante.
La innovación también llegará a las estaciones de servicio. El próximo 23 de junio, YPF inaugurará el primer RTIC del mundo de habla hispana enfocado en el monitoreo y análisis de estaciones de carga, con tecnología de micropricing, que permitirá ajustar precios según la franja horaria. “Vamos a dejar de perder dinero en momentos de baja demanda y los usuarios tendrán beneficios reales”, aseguró.
Biocombustibles: una ley que incluya a todos
Consultado por una eventual nueva ley de biocombustibles, Marín fue categórico: “No puede ser por lobby. Tiene que haber una mesa con las tres patas: el campo, las petroleras y las automotrices. Si no están todos, no es una ley buena para la Argentina”. En su visión, la regulación debe construirse desde la equidad y con un enfoque integral de país.
«Las camisetas de Messi no venden gas, Milei sí»
En un tramo más político de su intervención, Marín se refirió al impacto de las condiciones macroeconómicas en la competitividad internacional del país. “Por más que tengamos al mejor del mundo, con una macro mala no vendés gas. Las camisetas de Messi no venden gas, Milei sí”, lanzó, en alusión al cambio de escenario económico que —según remarcó— permitió a YPF comenzar a recuperar valor de mercado tras años de estancamiento.
Marín recordó que cuando asumió la conducción de la empresa en diciembre de 2023, su objetivo fue cuadruplicar el valor de la compañía, algo que —asegura— está en marcha gracias a un contexto económico más favorable y una estrategia de comunicación alineada. “Durante 20 años YPF solo perdió valor. Hoy ya estamos en paridad de importación y pensamos más allá de 2030”.
Metas ambiciosas
El presidente de YPF anunció que la empresa producirá por sí sola 820.000 barriles de petróleo y 174 millones de metros cúbicos de gas por día hacia el final de la década. Se proyecta la perforación de 2.000 nuevos pozos, una cifra que supera todos los realizados hasta ahora en Vaca Muerta. Además, confirmó que los primeros dos proyectos bajo el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) pertenecen a la empresa: el parque solar El Quemado (Mendoza) y el Oleoducto Sur, que conectará Vaca Muerta con un puerto de aguas profundas en Río Negro.
La inversión total del sector energético nacional se equiparará, según Marín, a la de las grandes petroleras globales. YPF ya firmó acuerdos estratégicos con Golar, Shell, ENI y Pan American Energy, y proyecta seguir sumando aliados internacionales para el ambicioso proyecto GNL.
“Queremos ganar plata en todo lo que hacemos, generar valor para los accionistas y posicionar a la Argentina como una potencia energética. Esa es nuestra meta y la vamos a cumplir”, cerró Marín.