Tras un resultado favorable para el oficialismo en las elecciones de convencionales constituyentes, Gisela Scaglia, vicegobernadora de Santa Fe, celebró – en diálogo con radio Mitre- lo que consideró un triunfo político y una señal clara de apoyo ciudadano a la gestión de Unidos para Cambiar Santa Fe.
“Fue un día muy importante para la provincia. Hacía 62 años que no se reformaba la Constitución, y que la gente nos haya acompañado de esta manera también habla del trabajo que venimos haciendo en este año y cuatro meses”, sostuvo Scaglia.
En total, Unidos obtuvo 33 de los 69 convencionales constituyentes que formarán parte de la reforma constitucional, un número clave en la composición de la convención. “Es difícil de explicar, lo sé. Se votaban 50 convencionales por lista y 19 por departamento. Pero lo importante es entender que este proceso no busca sólo reformar por reformar, sino modernizar nuestra Constitución para las próximas generaciones”, explicó.
Cambios profundos, más allá de la reelección
Consultada sobre si el objetivo principal de la reforma es permitir la reelección del gobernador, Scaglia fue clara: “No. Esta reforma va mucho más allá. La reelección no tiene nada de malo —de hecho, todos los gobernadores salvo los de Santa Fe y Mendoza pueden hacerlo—, pero lo que buscamos son cambios estructurales: ficha limpia, eliminación de fueros, fin de las reelecciones indefinidas, extinción de dominio para narcos, y equilibrio fiscal constitucional”.
Además, apuntó a terminar con los denominados “cargos hereditarios” dentro del Estado provincial y con prácticas arraigadas que, según ella, ya no representan a la ciudadanía: “Queremos que las empresas públicas estén ajustadas al Estado que tenemos, y no sean aguantaderos políticos”.
El rol del PRO y la participación ciudadana
También destacó el rol del expresidente Mauricio Macri durante el proceso: “Nos acompañó mucho. Planteó que esta reforma tenía que tener bases como la transparencia, el equilibrio fiscal y los principios del PRO. Y el gobernador lo escuchó”.
Sobre el dato preocupante de participación —el 42% del padrón no fue a votar—, la vicegobernadora reconoció que “estas elecciones intermedias no son atractivas para la gente” y dejó abierta una puerta al debate institucional: “Tal vez sea momento de revisar el sistema de las PASO en Santa Fe. Es una discusión que merece darse”.