Los descuidistas son delincuentes que actúan rápido y de manera oportunista, aprovechando los descuidos de las personas para robar sus pertenencias. Este tipo de robo suele ser común en la ciudad, y su característica principal es la sutileza: los ladrones observan el entorno en busca de una distracción o un momento de vulnerabilidad para actuar sin ser detectados de inmediato. Las víctimas suelen dejar objetos de valor a la vista o en lugares desprotegidos, lo que les facilita el trabajo a estos delincuentes.
El pasado sábado, cerca de las 20 horas, se vivió un episodio de este tipo en Rafaela, cuando un hombre que trabajaba en un taller de la calle Aristóbulo del Valle al 1200 sufrió el robo de una amoladora. Según comentaron los vecinos a este medio, el hombre había dejado la herramienta sobre la vereda por un instante, lo que fue suficiente para que un descuidista se la llevara. El ladrón, aprovechando la situación, tomó la herramienta y escapó corriendo hacia el barrio Villa Podio.
Los vecinos advirtieron la situación, pero a pesar de los intentos por localizar al ladrón, no pudo ser detenido por la policía. Este hecho pone en evidencia la necesidad de extremar las precauciones al dejar objetos de valor en espacios públicos, incluso por breves momentos, ya que los descuidistas actúan en segundos y pueden desaparecer rápidamente entre las calles de la ciudad.
Fuente. RAFAELA NOTICIAS