Al menos cuatro personas murieron desde el sábado por la noche cuando múltiples y enormes tornados azotaran el estado de Oklahoma, en el centro-sur de los Estados Unidos, según el balance que ofreció el gobernador del estado, Kevin Stitt, durante una conferencia de prensa.
De acuerdo con Stitt, en la ciudad más afectada de Sulphur, en el condado de Murray, en el sur de Oklahoma, una persona falleció y unas 30 resultaron heridas a raíz de al menos dos grandes tornados, que arrasaron varias casas y edificios.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió un alerta de inundación para la localidad, de acuerdo con un informe de la agencia de noticias Xinhua.
«Parece que fueron destruidos todos los negocios del centro aquí en Sulphur. Definitivamente, nunca he visto tanto daño desde que asumí como gobernador», comentó Stitt.
Otras dos personas, entre ellas un bebé, fueron encontrados sin vida en la ciudad de Holdenville, donde al menos 14 viviendas resultaron dañadas o destruidas.
El cuarto murió cerca de una carretera interestatal, informaron medios locales.