Con una superlativa actuación de Lionel Messi, autor de los tres goles del partido, el seleccionado argentino de fútbol superó a su similar de Bolivia y sumó otros tres valiosos puntos en su camino al mundial de Qatar. Argentina, que viene invicta en las Eliminatorias, aprovechó la noche de retorno al Monumental de Núñez y con presencia de público en las tribunas por primera vez desde el comienzo de la pandemia, para festejar, al final del encuentro, el título continental obtenido en Brasil, con una gran fiesta y la vuelta olímpica con la Copa América.
Messi se asoció a la fiesta, claro que sí. Primero, con un exquisito caño y una definición perfecta para abrir el marcador. Luego, coronando una gran jugada de ataque en el segundo tiempo, cuando el resultado todavía estaba abierto. Y finalmente aprovechando un rebote en el arquero tras un fuerte remate de media distancia, que lo encontró en posición de «pesca» en el medio del área, y donde «fusiló» al arquero boliviano.
El «hat trick» del capitán argentino le permitió superar a Pelé, llegando a 79 anotaciones, como máximo goleador de selecciones de fútbol sudamericanas. Y también superó a su amigo Luis Suárez como máximo artillero en Eliminatorias mundialistas, llegando a las 26 conquistas.
Entrevistado al final del partido, Messi se quebró en lágrimas tras recordar que «esperé mucho este momento» y mencionar que sus padres y sus hermanos estaban presentes en el estadio. Luego recibió la Copa América y pudo darse el gusto de encabezar la vuelta olímpica en el estadio.